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lunes, 26 de marzo de 2018

EL CASERÍO.

 Breve relato.

Allí había quedado el caserío abandonado.
La casa deshabitada sin tejidos ni piel.
Todo se había evaporado.
Un olor a reminiscencias brotaba de los troncos  y ciertas plantas aún permanecían de pie.
Los líquenes se veían guindar del pasillo superior.
Las blancas piedras en hileras quedaban allí como detenidas.
Una mariposa azul giraba sobre la palmera como queriéndola besar.
Sus ojos todo lo habían desaparecido.
El promontorio de luz seguía como una luciérnaga en pleno día.
Quemaba el sol sobre la tierra herida una concha de caracol.
-¡Ah don Ramón qué hace usted por aquí!- 
Era la voz ronca y larga de don Torcuato.
-Vine a ver los recuerdos en este caserío.-
-Su prometida lejos se fue al mundo invisible- atinó con voz parsimoniosa.
Ambos se quedaron en silencio y un sol abrazador quemaba los últimos vestigios de soledad y de recuerdos en esa casa.
-Sí lo sé!- ¡lo sé!
Vine porque tenía una promesa al Cristo Negro.
Y quería pasar por el cementerio del caserío a ver la tumba de
Don Pancracio.-
Arrancó una sencillas flores que crecían silenciosas debajo de un mango.
Y al despedirse de don Torcuato le estrechó su mano derecha y siguió su duelo silencioso.
Las aves cantaban sobre los árboles.
A lo lejos una música de marimba se oía en alguna casa de esas Lomas.
El sol comenzaba a precipitarse en picada sobre los cerros lejanos.
Y en los ojos de Ramón se veían  venir un rocío de lluvia que bajaban de sus pestañas.
El día acuchillaba con sus manos desgarradas el suelo árido por donde pisaba  Ramón Trujillano.
Y del corazón de la tierra brotaba la sangre a borbotones.
Sus pasos se fueron haciendo lentos y lánguidos.
Y como si fuera un águila se fue perdiendo en la lejanía.
Hoy se oye el rumor de sus pasos entre las hojas del aguacate por ese camino polvoriento como pisada de largatija que huye despavorida del trueno y de la lluvia que moja todas las casas de la loma como queriendo inundar aquellos ojos de RECUERDOS...



Rafael Deliso Guerra.
26/03/2018



Licencia de Creative Commons
EL CASERÍO. by Rafael Deliso is licensed under a Creative Commons Reconocimiento 4.0 Internacional License.
Creado a partir de la obra en http://ubunturamade.blogspot.com/2018/03/el-caserio.html.

miércoles, 21 de marzo de 2018

MARZO Y ABRIL.

Cerro Kairoi, valle de San Diego, Valencia, Venezuela. Fotografía tomada de internet.

Cedro, en el liceo Hipólito Cisneros, La Esmeralda.Valencia, Venezuela.


Breve relato.

Marzo y abril son meses de anticipo de lluvias.
Son calurosos.

Los árboles dejan desprender sus amarillas hojas y se llenan de amarillas flores.
¿En qué cementerio de hojarasca duerme el aparecido?
El araguaney florece en marzo.
El roble luce aurífero.
Los árboles se cubren de fiesta.
El apamate prepara sus fulminantes flores.
El calor arrecia en marzo.
La lluvia va preparando sus morteros.
Poco a poco se van llenando las nubes en el silencio del mes de marzo y ya en abril disparan sus primeros cartuchos.
Me quedé debajo del roble viendo como los pájaros pasaban hacia los cerros.
Kairoi está detrás.Es mágico y silencioso.
Dicen que allí nace la sombra del que nunca fue.
Es el cerro que nos acompaña en este viaje. .
El calor lo abraza al mediodía.
Levitan fantasmas sobre su pelaje sombrío.
Desde aquí me veo sobre sus lomos.
Cabalgo silencioso sus soledades .
Debajo del  roble crece una soledad de hormigas obreras

que baten el barro con el sudor del rocío
que suspendido brotan en los hongos.
Es mi viaje
que apenas hago sobre el callado valle

donde duermen las fantasmales apariciones 
de mi infancia.




Rafael Deliso.
20 de marzo de 2018

 Licencia de Creative Commons
MARZO Y ABRIL. by Rafael Deliso. is licensed under a Creative Commons Reconocimiento 4.0 Internacional License.
Creado a partir de la obra en http://ubunturamade.blogspot.com/2018/03/marzo-y-abril.html.

miércoles, 14 de marzo de 2018

CON UNA ROSA EN MIS MANOS.

CON UNA ROSA EN MIS MANOS.

Breve relato.


Me quedé solo.
Ya la noche había abierto sus puertas
y dejaba entrar a sus luceros.
Me quedé solo con una rosa en mis manos.
Los últimos resplandores del ocaso
morían silencioso.
El silencio hacia su presentación
con el viento suave que rozaba las ramas y todo parecía estático.
Ví en el cielo el último pájaro de este verano que se perdía como una linea en el firmamento.
Es extraño saber que los pensamientos
vuelan con alas de cielo y que se pierden en la distancia .
Verme tan distante pensé en el suicido.
Cada instante un sentimiento o un pensamiento se suicida en el silencio del corazón .
El desprecio duele.
Duele que te ignoren.
Todo corría dentro de mi.
Un fluido de ideas y pensamientos se arremolinaban golpeando los cristales de la ventana.
Se oían voces extrañas como si hablaran seres angelicales desde el otro lado de la calle.
Tuve que voltear para saber si era conmigo.
Pero no, nada había más allá.
Desde el otro lado del mundo quizás vuelva la rosa a enraizarse.
Sacudí mis manos fuertemente contra el viento.
Si era yo solo con una rosa roja en mis manos pensando en ella.
Tarde era el instante para retraerme.
Me ví sin oficio .
Sin mis libros y si un lápiz
despojando a la noche de luceros como una margarita .
Era un día lunes como hoy.
A nadie le importa que me haya quedado con una rosa roja esperando por ella esta noche.



Rafael Deliso Guerra.
12 /marzo 2018
Todos los derechos.®

 Licencia de Creative Commons
CON UNA ROSA EN MIS MANOS. by Rafael Deliso is licensed under a Creative Commons Reconocimiento 4.0 Internacional License.
Creado a partir de la obra en http://ubunturamade.blogspot.com/2018/03/con-una-rosa-en-mis-manos.html.

jueves, 8 de marzo de 2018

DÍA INTERNACIONAL DE LA MUJER.

DÍA INTERNACIONAL DE LA MUJER.
MI HOMENAJE.
¡Felicitaciones a todas las mujeres del mundo!

Sin ellas el mundo seria un planeta sin vida y sin poesía.
Sin amor.
Sin árboles.
Ni flores
Ni frutos
Ni lunas.
Ni estrellas.
Ni ríos
Ni mares
Ni mariposas.
Ni pájaros.
Es decir, el mundo sin ellas
sería vacío y desordenado.
Y carecería de musica y de color.
Y de inspiración para los poetas.
Ustedes son la razón de vivir.
Y sin ustedes el vivir dejaría de latir .
Y sin su latir mejor es morir.


A todas mis felicitaciones.

Rafael Deliso Guerra.
Valencia- Venezuela .

LA MUJER.

Hecha del hombre.
no de su cabeza.
para ser superada,
ni de sus pies
para ser pisoteada.

Sino de su pecho
para ser protegida.
Junto a su corazón
para ser amada.

Anónimo. (No es de mi autoría)

¡Felicitaciones a todas esas mujeres luchadoras y emprendedoras, tiernas y dulces, esposas y madres.
Que sin ellas el mundo no podría ser
mundo!